Incendio en un desguace de San Martín de la Vega moviliza un amplio operativo de emergencia. Panorama inicial del incendio y primeras actuaciones.
El incendio declarado en un desguace situado en la confluencia de la calle Cobre y la calle Plomo, en San Martín de la Vega, generó una inmediata alarma entre los trabajadores del polígono industrial y movilizó a un amplio dispositivo de los Bomberos de la Comunidad de Madrid.
Las llamas, que se originaron en una nave repleta de vehículos, residuos metálicos y elementos altamente combustibles, avanzaron con gran rapidez debido a la naturaleza del material almacenado. La gran columna de humo, visible desde diversos puntos del municipio, puso en evidencia la magnitud del suceso desde los primeros minutos.
Las autoridades ordenaron desalojar distintas industrias cercanas al lugar afectado para minimizar riesgos y garantizar la seguridad de los trabajadores. Paralelamente, los equipos de emergencia establecieron un perímetro de seguridad con el apoyo de la Guardia Civil y la Policía Local, asegurando el tránsito fluido de los vehículos de extinción y evitando la presencia de curiosos en áreas peligrosas.
Importancia del ignifugado de naves en espacios industriales
La rápida expansión del fuego en el desguace volvió a poner sobre la mesa la relevancia del ignifugado de naves, una medida esencial para reforzar la resistencia estructural frente a altas temperaturas. En espacios donde se almacenan vehículos, aceites, combustibles y elementos metálicos susceptibles de avivar las llamas, disponer de materiales ignífugos adecuados disminuye la probabilidad de colapso estructural y ayuda a contener el avance del fuego dentro de una misma instalación.
Las condiciones del lugar, sumadas a la presencia de una gran cantidad de restos inflamables, aumentaron la dificultad de la intervención. Los bomberos tuvieron que actuar con métodos específicos de refrigeración y control, empleando herramientas de apertura, cámaras térmicas y equipos de ventilación para atacar los focos más profundos del incendio. Un diseño constructivo protegido con tratamientos ignífugos podría haber reducido sustancialmente la intensidad del calor y la velocidad de propagación.
Servicios especializados y papel de las empresas de ignifugaciones
El segundo punto crítico que se evidenció durante el operativo fue la necesidad de contar con soluciones preventivas previas al incidente. Por ello, la labor de las empresas de ignifugaciones resulta decisiva. Su trabajo no solo consiste en aplicar recubrimientos protectores, sino en evaluar las características del entorno, los riesgos específicos del sector industrial y los puntos vulnerables de cada nave o complejo logístico.
Los expertos en protección pasiva diseñan y ejecutan tratamientos que permiten aumentar la resistencia al fuego del acero, el hormigón o los cerramientos, elementos que, sin una protección adecuada, pueden deformarse o perder integridad en pocos minutos. Esta intervención especializada, cuando se realiza de manera preventiva, tiene un impacto directo en la seguridad del personal, en la integridad de la infraestructura y en la capacidad operativa de los equipos de emergencia.
En el caso del incendio del desguace, los técnicos destacaron que la aplicación de sistemas de protección pasiva hubiera ofrecido un margen de actuación mucho mayor, reduciendo el riesgo de propagación hacia otras naves colindantes y evitando parte de los daños estructurales registrados.
Consecuencias y desafíos de un incendio nave en zonas industriales
El incidente elevó el nivel de alerta en todo el polígono industrial, obligando a las autoridades a reforzar la coordinación y evaluar la posible propagación hacia otras instalaciones. En un incendio nave, los riesgos aumentan de forma exponencial cuando el interior contiene depósitos de combustibles, piezas metálicas acumuladas, aceites y componentes eléctricos. Además, la combinación de altas temperaturas con restos de chatarra calcinada genera un entorno extremadamente volátil.
Los bomberos afrontaron un desafío complejo debido a la densidad del humo, la presencia de vehículos en llamas y el riesgo de colapso parcial de la estructura principal. Las labores de extinción se prolongaron durante horas, enfocadas no solo en apagar las llamas, sino en evitar reactivaciones derivadas de focos ocultos en montones de material quemado.
A esto se suma el impacto ambiental, ya que los humos generados por la combustión de vehículos contienen partículas tóxicas que requieren una evaluación posterior, especialmente en zonas industriales donde puede haber continuidad de actividad tras el siniestro.
Actuación sanitaria y preventiva durante la emergencia
El SUMMA 112 permaneció en constante vigilancia durante toda la intervención, preparado para atender cualquier complicación sanitaria derivada del siniestro. Aunque no se registraron heridos, la inhalación de humos, los golpes de calor y las lesiones por manipulación de elementos inestables son riesgos habituales en estas situaciones, por lo que la presencia sanitaria in situ resultó imprescindible.
La coordinación entre todos los cuerpos operativos facilitó una intervención ágil y ordenada. La Guardia Civil y la Policía Local controlaron accesos, mientras los equipos técnicos evaluaban continuamente la estabilidad de la estructura incendiada. La prioridad fue evitar que las llamas alcanzaran una segunda nave del complejo, donde también se almacenaban materiales que podrían haber intensificado el incendio.
Evaluación de daños y repercusión en la actividad del polígono
Tras controlar el fuego, se inició una fase de inspección para determinar la gravedad de los daños. La nave quedó prácticamente calcinada y numerosos vehículos resultaron destruidos. La paralización temporal de varias industrias del polígono afectó a la actividad comercial del área, generando retrasos en la logística interna y en los tiempos de producción.
Además, la retirada de escombros, vehículos calcinados y restos metálicos exigió maquinaria especializada y técnicos capaces de identificar zonas con riesgo de reignición. La complejidad del material afectado implica un proceso de recuperación prolongado que, en algunos casos, puede extenderse durante varios días.
Reflexión final sobre la prevención y seguridad industrial
El incendio del desguace de San Martín de la Vega pone de manifiesto la importancia de aplicar políticas sólidas de prevención, mantenimiento y protección en el entorno industrial. La implementación de sistemas ignífugos, planes de evacuación actualizados, formación del personal y auditorías periódicas son medidas imprescindibles para garantizar la seguridad de trabajadores e infraestructuras.
Una adecuada preparación preventiva no solo reduce el impacto de situaciones como esta, sino que mejora la capacidad de los equipos de emergencia para actuar de forma eficiente y segura.
